¿Dormís lo suficiente?

Napoleón Bonaparte, el emperador francés, dormía muy poco. Se acostaba entre las 10 pm y las 00 am, dormía hasta las 2 am y continuaba trabajando hasta las 5 am y volvía a dormir hasta las 7 am.

El inventor norteamericano Thomas Alva Edison y el ex-primer ministro inglés Winston Churchill, dormían cuatro horas.

Salvador Dalí, el gran artista español, para dormir se sentaba en un sillón, dejaba en el piso un plato de metal y se abandonaba al sueño con una cucharita entre sus dedos; dormido, sus dedos se relajaban y dejaban caer la cucharita golpeando el plato; alertado por el modesto ruido, despertaba y reanudaba su actividad pendiente.

Pero, el dormilón más célebre fue sin duda el gran científico Albert Einstein, que no movía una neurona si no había dormido un mínimo de diez horas.

Dormir es necesario para reponer las sustancias químicas del cerebro y para que el cuerpo descanse.

Algunos investigadores sostienen que el cerebro organiza y almacena recuerdos durante el sueño.

No dormir lo suficiente afecta el funcionamiento durante el día, el equilibrio hormonal, el apetito y el sistema inmunológico.

Pero, ¿cuánto debemos dormir?

Las presiones de la vida aumentan los desvelos, sin embargo, como  sugerencia,  se debe descansar de acuerdo a los siguientes estándares:

• Lactantes, de 11 a 12 horas.
• Un niño, de 9 a 10 horas.
• Un adolescente, de 8 a 9 horas.
• Un adulto, de 7 a 8 horas.
• Las personas mayores de setenta años, de 5 a 6 horas.

Yo Quiero ¡Vivir Sano! Y ¿Tú?

Nota de Quierovivirsano.org